lunes, 2 de julio de 2018

18. EL CRONISTA: "ARROYO EN LA REVISTA DE ESTUDIOS EXTREMEÑOS"

Por Francisco Javier García Carrero
           Cronista Oficial de Arroyo de la Luz

El pasado 24 de mayo, y en el contexto de la Feria del Libro de Badajoz, se presentó en la carpa de conferencias un nuevo número de la Revista de Estudios Extremeños con motivo de la celebración de su 90 aniversario desde su fundación (1927-2017). Un acto cultural e historiográfico que contó con la presencia de la diputada de Cultura de la Diputación de Badajoz, Cristina Núñez, y del director de la revista que se homenajeaba, el historiador Fernando Cortés. 

En este último número han colaborado un total de 23 historiadores que introducen una temática muy variada en cuanto a su contenido y en íntima relación con nuestra región. Han firmado artículos historiadores nacionales como Enrique Cerrillo, Miguel Rodríguez Cancho o Enrique Moradiellos, entre otros. También historiadores internacionales como el investigador francés Gerad Dufour o la historiadora francesa y especialista en Zurbarán Odile Delenda.

De la misma forma, en este último número he vuelto a tener el honor de participar con un artículo que lleva por título "Del Puerco a de la Luz en la Revista de Estudios Extremeños (1927-2017)”. El estudio presentado, como señala el resumen inicial que le acompaña, sintetiza la historia de noventa años de una de las localidades señeras de la Alta Extremadura. Se trata de una de las poblaciones que mayores transformaciones ha experimentado en los años objeto de estudio. Modificaciones que afectaron incluso al propio nombre de la villa. También se analiza los contactos que siempre ha mantenido la Revista de Estudios Extremeños con la localidad en diversas investigaciones históricas o literarias, entre otras facetas artísticas.

El artículo está dividido en 5 apartados que dibujan cronológicamente las fases del discurrir histórico de nuestro pueblo, epígrafes que he titulado de la siguiente forma:

1.      De la dictadura primorriverista a la democracia republicana (1927-1936).

2.      La Guerra Civil que nunca existió (1936-1939).

3.      Tiempos de hambre, estraperlo y revistas literarias (1939-1953).
4.      Emigración, desarrollismo y Tardofranquismo (1954-1979).
5.      Recuperación de la libertad (1979-2017).
El trabajo, junto al texto escrito, incorpora dos cuadros; el primero refiere todos los alcaldes de la localidad en estos noventa años y el segundo recoge la evolución demográfica de la población durante estos años. Por otro lado, hemos incorporado 4 imágenes que entiendo conforman adecuadamente esta fase estudiada de Arroyo. La primera es la “Manifestación popular del Sindicato Luz y Progreso”, una instantánea del año 1932 y tomada en la puerta del Ayuntamiento; la segunda lleva por título “Arroyanas en traje de gala”, cuya autora fue Ruth Matilda Anderson del año 1949 y fotografía que dio la vuelta al mundo. La tercera está fechada en 1963 y retrata a los “Maestros arroyanos con su alcalde”. Por último, la cuarta fotografía es del año 2017 y cuya autoría es de la Asociación Paisajes y Fiestas, su “Barrio judío de Arroyo” es un magnífico compendio de todo lo que hemos sido, y de todo lo que deberíamos proyectar para un futuro si cabe más esplendoroso.
Manifestación popular del sindicato Luz y Progreso (1932)
Arroyanas en traje de gala (Ruth Matilda Anderson) 1949
Maestros arroyanos con su alcalde (1962)
Barrio arroyano en la actualidad (APyF)


La revista completa con sus distintos artículos está llegando en los últimos días a todas las bibliotecas de Extremadura de manera física (incluida la de nuestra localidad) y, además, está totalmente accesible a través de la red. De esta forma, la plataforma de la propia revista ya la tiene subida a la Web e, igualmente, la recogen también portales de difusión de producciones científicas como Dialnet, una plataforma de acceso a la cultura de lo más recomendable y que ha sido creada hace ya unos años por la Universidad de la Rioja.
Teniendo en cuenta todo lo señalado, he querido que el artículo de este caluroso julio esté centrado en este estudio que estamos comentando. Incorporarlo completo al blog sería demasiado extenso, por lo que he pensado que el último capítulo puede ser lo suficientemente ilustrativo. Lo copio tal cual, únicamente se suprimen, para realizar una lectura más fácil, las notas a pie de página.


5. RECUPERACIÓN DE LA LIBERTAD (1979-2017).
El año 1979 fue un año importante en toda España. En el mes de abril se celebraron las primeras elecciones locales de la democracia, un proceso que no se había vivido en nuestra población desde abril de 1931. Arroyo tuvo que elegir a 13 regidores para el Ayuntamiento ya que la localidad contabilizaba en aquel momento casi 6.500 habitantes. A ese proceso electoral se presentaron tres candidaturas, el PSOE con José María González Bravo a la cabeza, candidato que a la postre fue elegido alcalde gracias a su triunfo por mayoría absoluta; la UCD y una Agrupación de Electores que se autoafirmaba independiente.
El PSOE volvió a recuperar el poder de manera democrática después de la salida abrupta del mismo en 1936 y cuando regía el Ayuntamiento Medardo Cervera. Otro aspecto significativo de este proceso electoral fue la elección de dos mujeres como concejalas del Consistorio, un aspecto destacable, y más teniendo en cuenta la función de “mera comparsa” que el Régimen anterior había otorgado siempre al sexo femenino durante cuarenta años. Las dos “valientes” que iniciaron su andadura política en un momento aún dubitativo de afirmación de la libertad fueron Antonia Femia Cordovilla, en las siglas del PSOE, y Juana Sánchez Barrero que participó de la lista de UCD.
La década de los ochenta del siglo pasado, y a pesar de todas las dificultades, fueron los años de la conquista de la libertad. Después de un intento fracasado de volver a un pasado luctuoso que se materializó el 23 de febrero de 1981, Arroyo se volcó con alegría a tratar de recuperar el tiempo perdido. Fueron años de conferencias en libertad, de institucionalización de jornadas culturales que patrocinadas por el Ayuntamiento tuvieron un seguimiento muy notable. Una “Semana Cultural” que gracias, una vez más, a la organización del poeta local Ramos Aparicio, los arroyanos pudieron escuchar de sus labios el recitado poético de Jesús Delgado Valhondo. Fue tal el éxito de la jornada, y el entusiasmo del público con el poeta emeritense, que no pudo impartirse, por falta de tiempo, la conferencia de Tomás Martín Tamayo, el otro invitado de aquel día y que iba a cerrar aquel evento.
Fueron años también de búsqueda de la singularidad regional, en consonancia a lo que estaba sucediendo a nivel del Estado. Obviamente la recuperación de las libertades quedó plasmada en el siguiente proceso electoral a nivel local. Si en 1979 fueron tres las posibilidades de elección, en 1983 ya eran cinco las candidaturas por las que pudieron optar los arroyanos. El pueblo estaba abrazando la libertad que permitía el sistema democrático. No obstante, el resultado final fue una nueva victoria del Partido Socialista, aunque ahora llevaba un nuevo número uno, Felicísimo Bello Merino. Un regidor que con tres triunfos consecutivos, aunque no siempre al frente del PSOE, marcó el devenir en los designios del Ayuntamiento arroyano durante doce años (mayo de 1983- mayo de 1995).
Efectivamente, Bello Merino, que fue el regidor que desmontó “nominalmente” el franquismo en la localidad, al menos en lo que respecta al callejero local que estaba repleto de recuerdos a la dictadura, no siempre estuvo al frente de la candidatura del PSOE. En las elecciones de 1991 creó y presidió un grupo autónomo, ASI (Agrupación Socialista Independiente), un partido que le reportó un gran éxito electoral y que derrotó al hasta entonces imbatido PSOE local, y eso que el candidato oficial socialista era una persona de total solvencia y estoy convencido que también como Bello Merino hubiese sido un magnífico alcalde. Por consiguiente, no es cierto lo que señala la popular Wikipedia, ignorando quién habrá redactado ese pasaje, cuando afirma sin ambages que el Ayuntamiento arroyano siempre ha estado “administrado” por el PSOE desde 1979. No es cierta pues la afirmación anterior que ignoramos si es mal intencionada o simple ignorancia.
Las tres legislaturas del alcalde Bello Merino están plagadas de actividades culturales. Durante su mandato se inauguró, por ejemplo, la Casa de Cultura, un edificio que otrora albergó una escuela y la prisión de la localidad y que ahora se edificó con un magnífico salón de actos y una biblioteca pública de la que carecía el pueblo. También apostó por el patrocinio de revistas culturales como Garabatos o Adagio, la primera de ellas una publicación que se decía trimestral y de la que se estamparon 11 ejemplares, ediciones en las que divulgaron un buen número de arroyanos y que hoy, pasados casi 30 largos años se convierten en referencia obligada para comprender el Arroyo de estos años.
En 1995 el Partido Socialista volvió a la senda de las victorias electorales locales. En este caso un desconocido y joven candidato forjado en la emigración en el País Vasco se hizo con la victoria en los comicios de aquel año, Lorenzo Pérez Durán. Llevaba como compañía a Dolores Pallero, una jovencísima abogada que posteriormente alcanzó metas mucho más ambiciosas cuando se convirtió en vicepresidenta de la Junta de Extremadura para orgullo de todos los arroyanos. Dos fueron las legislaturas de Lorenzo Pérez, ya que en 1999 volvió a revalidar su victoria en las urnas, incluso con mayor nitidez a la que presentó cuatro años antes.
El nuevo siglo trajo nuevas revistas culturales a la villa, Alfares, que vio la luz en el año 2001, un canal de información editado también por el Ayuntamiento y que pretendía divulgar valores, actuaciones y expectativas de la localidad al igual que lo habían hecho todas sus predecesoras. En 2003, y todavía durante el mandato de Pérez Durán, se publicó una pequeña obra que acercó a los arroyanos a la etapa de la Guerra Civil, un trabajo que hablaba por primera vez de arroyanos “paseados”, encarcelados y fusilados y que agotó su edición completa antes que se pudiera presentar de manera oficial. Aquello posibilitó que la obra se reeditase un año más tarde cuando ya el alcalde de la localidad era Santos Jorna Escobero, regidor que realizó el prólogo de esta nueva tirada.
Efectivamente, y desde 2003, el joven abogado Santos Jorna, presentó su candidatura amparado en las siglas del PSOE como sustituto de Lorenzo Pérez. Durante tres legislaturas fue el máximo mandatario de la localidad gracias a sus tres mayorías absolutas que encadenó consecutivamente. Fueron años también donde el deporte arroyano alcanzó sus cotas más elevadas, significativo ha sido el tiempo que el equipo de futbol ha militado en la categoría de bronce del fútbol nacional y, sobre todo, los años en que las chicas del vóley han estado en la cúspide del voleibol femenino de España.
           No obstante, el hito histórico más sobresaliente que la localidad ha experimentado desde el punto de vista político en el siglo XXI, ha sido el nombramiento de la primera alcaldesa de la población. María Isabel Molano Bermejo, ha logrado en 2015 un hecho hasta entonces nunca visto en nuestro pueblo, convertirse en la máxima representación del consistorio de Arroyo de la Luz, cuando otras localidades extremeñas y de menor prestancia, al menos demográficamente hablando, como Alange, lo habían conseguido hacía muchos años, concretamente durante la Segunda República. Su victoria, la victoria de todas las mujeres arroyanas, se logró en buena lid y de manera contundente sobre el resto de los partidos adversarios, incluso con un margen más amplio que el que tuvo su antecesor en su última etapa como alcalde. 

Primera fotografía en color (1949)