domingo, 10 de abril de 2022

LUZ EN LA BATALLA

   José Luis Solano Rodríguez

… y brillan, al anochecer, los astros en el firmamento.

                                                                     P J Castela Gil-Toresano    Atardecer en la dehesa

     Cuenta la leyenda que un día -en torno al veintitrés-  de abril del año 1229 las tropas leonesas de Alfonso IX  batallaron contra otras moras en un espacio que estas habían dominado  durante siglos,  alrededor de  un pozo que pasaría a llamarse de “las matanzas”, denominación  extendida en el tiempo  a la dehesa donde se ubica, al noroeste de Arroyo del Puerco, entonces aldea de Cáceres -hacia donde se dirigía la conquista-;  se echaba la noche, los cristianos, viendo que podían rematar la contienda, invocaron a la Virgen para que los socorriera ante la oscuridad amenazante y, según se ha transmitido,  apareció  sobre una encina, irradió  luz       y se culminó el enfrentamiento  con victoria para ellos.

      ¿Fue algo sobrenatural, inexplicable, milagroso, ese resplandor con presencia de la Virgen sobre ese árbol?.

       ¿Se trató de un acontecimiento astronómico raro, como el que parece ser ocurrió  con la estrella de Belén y el nacimiento de Jesús en el que pudo suceder el hecho de una alineación planetaria con el sol y la luna entremezclados en distintos puntos del zodiaco astral,  dando lugar a un fulgor súper brillante, suceso que sólo ocurre cada miles de años,  indicando la llegada de un líder especial que daría vida según la tradición oriental, con sus reyes magos, su incienso, símbolo en el zoroastrismo  de “luz eterna”?.

   ¿Quizás algo más sencillo, astronómicamente hablando, y frecuente, como es el hecho del alineamiento  de Júpiter y Saturno constatado en la edad media –hace casi 800 años, calculándose un miércoles 4 de marzo de 1226, tres años antes de   la conquista de Cáceres,  pudiendo tratarse en Arroyo, para esa fecha, de una escaramuza, de una lucha menor previa a ella y al lunes de Pascua -que  ese año fue el 30 del  mes- más conectada entonces, temporalmente,  con el domingo de piñata -primero  de Cuaresma-, que implicaba en la costumbre el  rompimiento de la olla, símbolo de la rotura del vientre materno para dar a “luz”,   persistiendo, quizás, el destello  por la aproximación en el cielo de los dos asteroides durante una prolongación temporal  que daría un haz de luz, como sucedió recientemente en 2020, atisbándose su luminiscencia mirando al horizonte en el crepúsculo a suroeste casi una hora  después de la puesta de sol –la oscuridad que se avecinaba en la batalla, el remate victorioso de la lucha en la conjunción planetaria posterior y, puede que, a la par de la rogativa mariana-, hecho que suele darse  cada veinte años y puede se repita, en plenitud, hacia 2080 por proximidad y, sobre todo, especialmente,  después de 2400, según Grant Mathews, astrofísico y cosmólogo?

   El fenómeno está  constatado en la carta astral, aunque los de esta generación no lo viéramos ni, seguramente, observemos lo que está por venir; la interpretación que se le quiera dar puede ser enfocada desde muchos puntos de vista: astronómico, literario , religioso exclusivamente, …

      No fue un hecho exclusivo de Arroyo: vírgenes de la luz se extienden por la geografía española y portuguesa1 sobre todo en su zona fronteriza, como ya analicé en anterior artículo, pero también más allá de ese espacio territorial va dejando huellas: Tarifa y su Virgen tienen una leyenda similar a la nuestra en la batalla del Salado; subiendo  a Cuenca, con su historia sobre la conquista de la ciudad , las luminarias en el cielo, la intervención guiadora del pastor Martin Alhaja que, también, parece ser, participó en la batalla de las Navas de Tolosa,  identificado como S Isidro, para facilitar la victoria.   Este hecho luminoso,  la religiosidad popular lo atribuye además a  Cristo, siendo muchas las imágenes a las que se les da  el calificativo de “luz”. Al margen,  fuera de batallas y conquistas, llegamos   a Avilés, donde el origen de la devoción a su patrona se fundamenta en el dios celta “lug” -¿qué similitud en el nombre con “luz”?- y, al igual, desde una colina, donde estaba su santuario, ahora, cristianizado,  ermita virginal, desprendía luminosidad a los cántabros.

    Esas celebraciones marianas suelen darse el lunes o martes de Pascua en la cultura cristiana,  santificando a la madre de Jesús, uniéndola al fenómeno de la Resurrección del hijo, en el paso de las oscuridad de la muerte a la “luz” de la reencarnación.

      Las leyendas suelen sustentarse sobre hechos reales que se adornan,  literalizan, deforman….pero algo de cierto suelen tener,  incluso  todo su contenido.

         Buen día de la Luz tengamos tras la oscuridad de estos dos años pasados.

 

 1. Lux Mundi. La religiosidad popular en torno a la Luz.- Ed. Instituto de Estudios Almerienses.- 2007


sábado, 2 de abril de 2022

59. EL CRONISTA: "ARROYO EL LUGAR MÁS DIVERTIDO DEL MUNDO (20-04-1992)"

  Por Francisco Javier García Carrero
 Cronista Oficial de Arroyo de la Luz 


            Decía la revista Vanity Fair que el 20 de abril de 1992 España se convirtió en el “lugar más divertido del mundo”. Lo que no sabía esa revista es que, como venía sucediendo desde hacía cientos de años, ese mismo día en Arroyo de la Luz, y dentro de ese mundo al que la revista aludía, era el lugar donde el divertimento llegaba a su cenit, y eso que todavía faltaban varios años para que declararan nuestro Día de la Luz como Fiesta de Interés Turístico Regional.  

Efectivamente, pocos arroyanos recordarán que el inicio de la festividad más sobresaliente de aquel Día de la Luz de 1992 coincidió exactamente con una fecha histórica para nuestro país. Y es que a las 12´00 h., es decir, en el mismo instante en que se daba el pistoletazo de salida a una pareja ataviada con el traje típico de la localidad portando el pendón del Ayuntamiento de Arroyo de la Luz, los reyes de España, don Juan Carlos I y doña Sofía, inauguraban con total solemnidad, y para todo el mundo, la EXPO de Sevilla. Pocos minutos después en Arroyo el primer caballo recorrió a galope tendido los 800 metros que separan las iglesias de San Sebastián y de la Asunción, y todo ello en medio de un público deseoso de emociones fuertes. En paralelo, en Sevilla, y en ese mismo instante quedó inaugurada una magnífica exposición que prácticamente la totalidad de los arroyanos de entonces visitaron más de una vez.

Apertura de la EXPO

20-04-1992. Portada de El País
        

Como todos los años, el alcalde de la localidad Felicísimo Bello con la ayuda del resto de la corporación, y en connivencia con la Cofradía que dirigía José Manuel Bañegil Molano (D.E.P), había organizado un programa de fiestas de lo más completo. Y nuevamente, como venía sucediendo desde hacía ya mucho tiempo, lo lúdico-religioso se volvió a entremezclar en perfecta simbiosis. Fueron varios días en los que el ambiente se fue caldeando hasta concluir con el día de la Romería que aquel año coincidió con el domingo 3 de mayo.

Los motores se pusieron a punto cuando la alcaldía de Felicísimo, junto a la Casa de Cultura, celebraron con enorme éxito de público y crítica, lo que ya fueron las VI Jornadas Teatrales. Un evento que siempre gozó en Arroyo de un público fiel y numeroso. Aquel año fueron cinco los grupos de teatro seleccionados a la hora de mostrar sus representaciones. El primer premio recayó en el grupo no profesional “Acebuche” que provenía de la localidad pacense de Aceuchal y que puso en escena la magnífica “La dama del alba” de Alejandro Casona. Una pieza teatral que, aunque escrita y publicada en Buenos Aires en 1944, dado que su autor se encontraba exiliado desde 1939, está ambientada en la Asturias rural y natal de su autor. Gracias a esta obra el grupo recibió unas muy dignas 125.000 pesetas además de una placa conmemorativa (eran más de tres veces la cantidad que se embolsaban los ganadores del primer premio de carrozas ya fuese en la versión de “típicas” o “artísticas”). De la misma forma, su actriz principal, Pepa Durán, se alzó con el primer premio por su papel de “Peregrina”.

Aquel año también se celebró el concurso de carteles que anunciarían el Día de la Luz. Un total de dieciocho obras se presentaron al certamen anual convocado desde el Ayuntamiento. Como había sucedido en otras ocasiones, hubo un magnífico nivel en las obras presentadas. El jurado otorgó el primer premio al cartel que firmaba Alfonso Pérez Serrano. Obtuvo el segundo premio el artista local Felipe Luis Aparicio Ramos (estupenda su intervención hace pocos días en el programa Puerta con Puerta) y también obtuvieron accésit por sus trabajos tanto Faustino Leal Cambero como Silviano Carrasco Salado.

Cartel ganador del Día de la Luz. 1992

El sábado 18 de abril, dos días antes de la fiesta grande, se celebró una “corrida de rejones” un evento que aquel año no estuvo exento de polémicas ya que el organizador del espectáculo, el señor Contreras, dejó entrever, o más bien manifestó abiertamente, que la Asociación Amigos del Caballo “Las Cuatro Esquinas” había vetado la inclusión en el cartel de las fiestas a un rejoneador extremeño, concretamente a Juan José Rodríguez. Unas afirmaciones que fueron desmentidas de forma contundente, categórica, y públicamente a toda la región por la directiva y por la asamblea general de esta asociación de caballistas señera en la localidad.

Celebrado con toda la festividad posible el lunes de Pascua, y entregados los premios a las carrozas en sus dos versiones de artísticas y típicas, caballos, parejas ataviadas con el traje local y las distintas comparsas que desfilaron por la Corredera, tres días más tarde, y no menos importante, lo más religioso hizo su aparición. El jueves 23 de abril a las 18´00 h. y con gran solemnidad salió desde su ermita la imagen de la Virgen de la Luz, que fue trasladada en camión-carroza hasta el pueblo, permaneciendo en el local de costumbre hasta que se iniciara la procesión.

A las 20.30 h., y como también era habitual, se inició la subida de la procesión desde la Plaza de la Constitución hasta la explanada de San Sebastián, donde tuvo lugar el recibimiento oficial. Aquel año el pregón de salutación a la Virgen corrió a cargo de nuestra querida Teodora García-Martín Molano (D.E.P), quien ofreció una sentidísima lectura que fue largamente aplaudida por el resto de arroyanos que escuchábamos en respetuoso silencio.

Muy pronto, y gracias a la labor del poeta local Eladio Sanjuán junto a la Cofradía que actualmente preside Antonio Cruz, podremos tener en un único volumen los pregones de salutación que año tras año se han dedicado a la Madre de todos. Concluido el pregón, la procesión se puso en marcha en dirección a la iglesia de La Asunción. Antes de entrar en el edificio se produjo desde el balcón del Ayuntamiento la bienvenida oficial por parte del señor alcalde, y antes que se procediera a la ofrenda floral que resultó todo un éxito.

En los días que permaneció la Virgen en el pueblo la novena fue predicada por Felipe Pulido, que era entonces delegado Diocesano de Pastoral Familiar. Y como también es tradicional, hubo días dedicados a la juventud, a las familias arroyanas, a los niños, a los mayores, amas de casa, a los arroyanos ausentes por la emigración y, por supuesto, a nuestros difuntos. El colofón de todas estas actividades tuvo lugar el día de la romería en el que, junto a la ermita, tuvo lugar una verbena amenizada por la orquesta La Latina que se inició a la conclusión de la misa de las 12 h. y que tuvo a los romeros moviendo el esqueleto hasta las últimas horas de la tarde de aquel 3 de mayo de 1992.

En paralelo a todos aquellos actos, en la Casa de la Cultura estuvo expuesta una colección de grabados y exlibris muy interesantes que pertenecían a la colección de Agustín Arrojo y que fue organizada por el Museo Pérez Comendador de Hervás y la ya desaparecida Caja de Extremadura. De la misma forma, en las pistas del colegio del “Pozo del Hambre” hubo una exhibición de kárate, y un par de convocatorias con concursos de dibujo y redacción que estuvieron organizados por la Cofradía de la Virgen y cuyo tema único para ambos concursos fue nuestra Patrona.

En fin, este año 2022 que, después de dos ejercicios sin poder disfrutarse, volveremos a recrearnos con caballos, carrozas, vino de pitarra y una nueva explosión de alegría y color en la Corredera, este cronista ha querido rememorar aquellas jornadas de hace nada menos que 30 años en los que el Día de la Luz y el inicio de la Expo92 coincidieron con total exactitud, y que hicieron de ambos eventos los lugares más divertidos del mundo.